Si piensas en Benidorm, seguramente te vendrán a la mente sus playas y su ambiente, pero hoy es día de hablar de su gastronomía. Benidorm es un paraíso para los amantes de la buena comida, con una oferta variada que va desde la cocina tradicional hasta propuestas más innovadoras.
¿Listo para un tour gastronómico?
- Arroz a Banda en Restaurante Ulia
No puedes visitar Benidorm sin probar el arroz a banda, un plato típico de la región valenciana. El Restaurante Ulia, situado en la Playa de Poniente, es conocido por su excelente preparación de este manjar. El arroz se cocina en un caldo de pescado que le da un sabor intenso y delicioso. Acompáñalo con un buen vino blanco y disfruta de las vistas al mar mientras te deleitas con cada bocado.
- Tapas Variadas en La Cava Aragonesa
Si te apasionan las tapas, La Cava Aragonesa es una parada obligatoria. Ubicado en el casco antiguo de Benidorm, este bar ofrece una amplia variedad de tapas que te permitirán probar un poco de todo. Desde croquetas caseras hasta jamón ibérico, cada tapa está preparada con ingredientes de la mejor calidad. No te pierdas sus famosas gambas al ajillo.
- Coca Farcida en Restaurante Aitona
La coca farcida es una especie de empanada típica de la Comunidad Valenciana, rellena de productos frescos y locales. En el Restaurante Aitona, situado en el centro de Benidorm, preparan una versión exquisita de este plato. El relleno puede variar, pero suele incluir atún, tomate, pimientos y huevo duro. Ideal para una comida ligera pero llena de sabor.
- Caldero en Casa Toni
El caldero es otro plato de arroz, pero en este caso, se cocina junto con pescado y mariscos en un caldero de hierro fundido, lo que le da un sabor único. Casa Toni, un acogedor restaurante familiar, es conocido por su versión de este plato. Cada bocado es un verdadero festín para los sentidos. No olvides pedir un poco de alioli para acompañar.
- Helado Artesanal en Gelateria Pinocchio
Después de tanta comida deliciosa, ¿qué mejor manera de terminar que con un helado artesanal? La Gelateria Pinocchio, situada en el Paseo de la Carretera, ofrece una increíble variedad de helados caseros. Desde sabores clásicos como el chocolate y la vainilla hasta opciones más atrevidas como el helado de turrón, aquí encontrarás el final perfecto para tu recorrido gastronómico.